Contada por el propio protagonista, un resumen de mas de 50 años de actividad.
Un relato íntimo de una vida dedicada al arte.
Contada por el propio protagonista, un resumen de mas de 50 años de actividad.
Un relato íntimo de una vida dedicada al arte.
Nunca se planteó que en algún momento tuviera que escribir su propia biografía enfrentándose a un folio en blanco para contar su relación con la farándula desde sus más inocentes inicios, porque, aunque sea en estos últimos años cuando más relación está teniendo con ella, siempre ha sido su vida. Y claro, lo debe hacer de memoria, porque además de fotografías y no muchas, no resulta sencillo, poco más tiene salvo sus recuerdos.
Y procura hacerlo del modo más ameno para invitarnos a seguir leyendo. Son 62 años y tiene mucho que contar.
Y comienza su relato.
Nos informa que nació en Falces el 18 de junio de 1960 a las 9 de la mañana; lo sabe porque, tras el fallecimiento de su padre, tiene que hacer los trámites necesarios en los que se le exige su partida de nacimiento. Y nació en casa, como tantos en esa época, en la casa de “Pichón” de la calle del “Esnuncadero”, para ser más exactos. Aunque podría hablar mucho de su niñez, bueno y malo, como en toda vida de cada persona, prefiere dejarlo para mejor ocasión, ya que ahora lo que le importa es su relación con la farándula que ha sido de siempre, desde que tiene recuerdos de adulto.
Se imagina que, en los pueblos de aquella época, los niños querían ser el siguiente en la cadena de la fama, en el supuesto de tener alguno en el pueblo, futbolista, torero, actor etc. En Falces, en los años sesenta, comenzaba a destacar en el mundo de la música Pedro Iturralde que llegó, como es de sobra conocido, a ser un músico de jazz reconocido a nivel mundial, así que muchos de su generación quisieron decantarse por la música.
No recuerda cuantos años tenía cuando inició su pelea con Don Hilarión Eslava, ese era el método de solfeo con el que todo el que quisiera ser músico tenía que empezar, después llegarían otros. Si recuerda con precisión que a los ocho años su abuela le regaló su primera guitarra. Por entonces, el aspirante a estrella de la música era muy poquita cosa, no como ahora y con sus 104 kilos, la guitarra abultaba más que el aprendiz de músico.
Si le hicieron tal regalo fue porque desde el principio de sus días, según afirma, ya le gustaba cantar y hacer «comedias», y no se extraña, su familia era muy cantarina (está seguro de haber escuchado a su madre cuando crecía en su barriga). A partir de ahí, siempre estaba con la guitarra puesta y cantando siempre que podía en público, en bares, por la calle, donde fuera y, por supuesto, sin perder la ocasión de subir a un escenario si esta se presentaba.
Se lamenta de no haber tenido la posibilidad de acudir al conservatorio, ya que le fue necesario ponerse a trabajar para ayudar a paliar las necesidades económicas de la familia, pero siguió con su vida farandulera en el pueblo.
De aquella época recuerda con mucho cariño algo que le hizo sentir lo que significa ser querido en tu pueblo, no se cansa de repetir que siempre ha habido un movimiento importante cultural en Falces, y por entonces se organizaban festivales populares (todavía se sigue haciendo y no solo en Falces sino en muchos pueblos de Navarra) de Navidad, y un concurso de villancicos para todos los chavales que quisieran participar. Solo recuerda el nombre de Mari Carmen Busto, pero sabe que había más personas que le ayudaron a prepararse para el concurso un villancico distinto a los tradicionales que cantaba por aquel entonces Palito Ortega. Se titulaba Changuito Dios, y le hizo ganar, a pesar de un gallo en la interpretación, el primer premio del concurso. Tan popular se hizo el villancico y el intérprete en el pueblo, que durante mucho tiempo le llamaron “Changuito”, y le pedían que lo interpretara montones de veces, aunque no fueran navidades.
En los años 70 llegó al pueblo un nuevo párroco y tuvo la feliz idea de fundar una rondalla a la que, por supuesto, se apuntó. Era Victorino Aranguren, que junto a Pablo Amorena con sus excepcionales arreglos y “las Franciscas” (no recuerda sus apellidos) enseñando bandurria y laúd, la pusieron en marcha.
Victorino siempre decía que fue Peio quien le enseño a tocar la guitarra para luego enseñar a los demás. Le dedicó un día esta cuarteta…
Tú sabias más que yo
Cuando empezó la rondalla
Ahora que sabemos todos
Suena bien si tú no fallas
Recuerda aquellos años con exultante alegría, participando a tope de todos los actos culturales que se organizaban. Falces siempre ha sido un pueblo con abundantes grupos culturales, le pesara a quien le pesara. Los que conocieron aquellos años del pueblo saben a qué se refiere.
La rondalla disfrutaba de muchas actuaciones en el pueblo, desde el principio, supone Peio que sería porque sonaba bien. Les reclamaban de pueblos cercanos y también participaron en concursos y programas de radio.
Como ya se ha dicho, procuraba estar en todos los movimientos culturales de su pueblo, asi que, además de la rondalla, por aquel entonces tuvo su primer contacto con el grupo semi-profesional de folclore “Hermanas Mendoza/Mendoza Ahizpak”.
Siendo innovadores ya entonces en sus propuestas culturales, en el espectáculo, combinaban las jotas navarras con el folclore vasco, siendo entre los años 1976 a 1981 cuando más actuaciones realizaron tanto en Navarra como en provincias limítrofes.
Peio dice que gozaron de mucha popularidad en aquellos años, y como consecuencia recibieron la llamada de la discográfica “Belter”, una de las más importantes discográficas del país por entonces y en la que solo grababan los artistas más importantes de la época. Y publicaron su primer LP “De Navarra hay que cantar”. Eso les dio un gran reconocimiento e hizo que las actuaciones se multiplicaran.
Dos años después del inicio de esta odisea, contactó con Peio y su grupo el sello “Soñua”, una discográfica navarra que estaba en sus comienzos. Proponiéndoles una nueva grabación “Mendoza ahizpak”.
En 1981, concreta Peio, participa la rondalla en una grabación de diferentes grupos en la discográfica IZ de San Sebastián, de la mano de Juan Mari Beltrán y con el patrocinio del Gobierno Vasco. “Euskal herriko soiñu tresnak” en la que también se grabó un video tocando por las calles de su pueblo, toda una novedad por aquel entonces, con la particularidad de que un jovencísimo Peio se atrevió a decir sus primeras palabras en euskera.
Todo esto se concentró en pocos años, en 1982, matiza, y, tras volver del servicio militar, abandonó Falces para trabajar en Pamplona en la discográfica Elkar. Este trabajo fue consecuencia de la grabación con Soñua y por ellos supo que Elkar buscaba representante para Navarra.
Los diez años comprendidos entre 1973 y 1983, fueron de continuo contacto con la farándula, afirma. Además de La Rondalla y Hermanas Mendoza, también formó parte de un grupo de teatro que llevaba años funcionando con éxito y que hoy día y gracias a algunos componentes de entonces sigue disfrutando de muy buena salud.
Es de esa época su primer contacto con el escenario como actor amateur, fue en las obras “La Sopera” de Robert Lamoreux, en el papel de Gastón, y “Un Enemigo del Pueblo” de Henrik Ibsen, en el papel de Morten Kiil.
El pueblo llevaba muchos años sin banda de música, siempre escuchó hablar de “La banda del sarampión”, nombre por el que se la conoció debido a la poca edad de sus componentes y que una gran mayoría de ellos contrajo esa enfermedad.
Es por ello que un grupo de amigos decide intentar recuperar la banda y dirigidos por Manuel Iturralde, hermano de los fallecidos Javier y Pedro, grandes músicos, se pusieron en marcha.
Se les unieron también músicos del pueblo a los que les encantó la idea y allá que fueron. El ayuntamiento les cedió los instrumentos que quedaban todavía de aquella banda y que restauraron. Algunos componentes compraron nuevos y a Peio se le asignó el clarinete.
De este modo se consiguió que durante algún tiempo volviera a sonar la música por las calles del pueblo ejecutada por músicos del pueblo.
Hubo que poner un nombre a la banda y, uno de los días que salieron a tocar, un amigo que no tocaba ningún instrumento (pituto) comenzó a ejercer de director de la misma durante toda esa mañana. Su mejor idea fue sustituir la batuta por un sarmiento. El nombre estaba puesto, “La banda del sarmiento”. No recuerda cuanto tiempo existió, sólo recuerda que disfrutó e hicieron disfrutar mucho.
De aquí en adelante haremos saltos en el tiempo, volveremos atrás algunas veces y seguiremos adelante en otras, ya que como Peio comento al principio, todo lo hace de memoria, y a veces esta es caprichosa.
Además de todo esto y como ya ha comentado Peio en otras ocasiones, siempre que tenía ocasión subía al escenario con diferentes grupos, podéis ver algunas fotos de esa época, aunque de otras formaciones no hay ninguna.
A finales de los 70, se embarcó en la recuperación de otro instrumento que hacía muchos años no sonaba en el pueblo, la Gaita Navarra, y de la mano de los entonces Gaiteros de Pamplona, y posteriormente de los de Estella, comenzaron a practicar y conocer el manejo de ese instrumento.
El servicio militar interrumpió el primer intento por su parte para quedarse en el pueblo y que no tuvo en consideración por su decidido deseo de marcharse a trabajar a la capital navarra. Fueron sus compañeros y amigos Toño, Canico y Salva, quienes hicieron y consiguieron que hasta el presente y como Gaiteros de Falces, el instrumento esté vigente en todos los actos culturales.
Por su parte, y después de unos años desligado del grupo al trasladarse a vivir a Mutilva, se matriculó en el conservatorio de Estella y fundó los Gaiteros de Aranguren, que contó con el apoyo del ayuntamiento del valle y la inestimable ayuda de sus amigos los Gaiteros de Falces y Gaiteros de Estella.
Le cabe el honor de haber fundado, junto a Tere y Kati, la Comparsa de Gigantes y Cabezudos del Valle de Aranguren, hasta entonces, otras comparsas llegaban de otros lugares a bailar por las calles durante las fiestas. Y en ella estuvo hasta el año 2012, en el que definitivamente, y tras comenzar a vivir en Pamplona de nuevo, pasó el testigo a sus compañeros tanto de instrumentos como de comparsa.
Es probable que se deje cosas en el tintero, contar la propia vida de memoria tiene determinados riesgos y uno de ellos es dejarse algunos detalles fuera.
Es a partir de 1982, cuando comienza una nueva etapa en su vida, sin desvincularse totalmente de los grupos culturales a los que pertenecía, mermó la posibilidad de seguir en ellos por la intensidad que requerían.
Puede decirse que, a partir de ese año, se enfrenta a la segunda parte de su vida. Reconociendo que tampoco empezó muy normal, los primeros quince días en la capital los pasa buscando trabajo y (esto lo conocen pocas personas) algunas noches las pasa durmiendo en un banco del parque del Bosquecillo. Era finales de marzo y no hizo ningún calor.
Tenía familia en Pamplona, a la que no informó de su presencia hasta no conseguir un trabajo y es entonces cuando recurre a pedir cama en casa de una tía. No permanece demasiado tiempo con ella, ya que sus nuevos compañeros de trabajo le ofrecen vivir con ellos. Nunca les agradecerá lo suficiente lo que hicieron por él; su amistad, aunque después sus caminos se separan, sigue intacta, y hoy día siguen compartiendo muchas cosas.
Como dijo al principio, el trabajo lo encontró gracias a la gente de Soñua con los que habían hecho la grabación de su segundo LP. Jokin Zamarbide le comentó que Elkar estaba buscando un comercial para Navarra y con todo el ánimo intacto se presentó al puesto.
Consigue el puesto y el 5 de abril comienza a trabajar. Por aquel entonces, muchos la recordareis, solía haber en los bares y tiendas expositores para la venta de casettes, y esos fueron sus comienzos de trabajo profesional en la música.
Se recorría toda Navarra mes tras mes reponiendo ventas y colocando nuevos donde podía, al mismo tiempo llevaba paquetes y otros encargos a las librerías y muestras a escuelas e ikastolas.
Los primeros discos que recuerda haber distribuido por tiendas fueron Noche de Rock&Roll, primer trabajo de Barricada, y el súper exitoso por aquel entonces “Señor Tomas” y, cómo no, los principales artistas de Elkar, Benito Lertxundi, Mikel Laboa u Oskorri.
Fueron años de incesante trabajo en la música y de mucha venta y, poco a poco, se fue introduciendo en el mundo de la música profesional, aunque solo fuera distribución y venta.
Estuvo en esas durante ocho años, de 1983 a 1991. Ese año deja Elkar y con otro socio, funda Etxe-Ondo, distribuidora de música y libros que, en 1995 y tras la separación de su socio, se convirtió en productora musical.
La especialidad de la empresa fue, esencialmente, el folclore navarro, gaiteros, joteros, acordeonistas y, sobre todo, música sanferminera, aunque también tenían y tienen cabida en la discográfica otros tipos de producciones que no sean de folclore, pero manteniendo como premisa ser de grupos o autores navarros.
Ese fue el verdadero inicio de Peio profesional de verdad con la música, ejerciendo algunas veces de productor ejecutivo y otras de productor artístico. De entonces a hoy, más de 150 trabajos han llevado su sello, antes como Etxe-ondo y en la actualidad como Ferminmusic.
Su primera producción fue Paseos por el Do de los Gaiteros de Falces, que se presentó el día que Pedro Iturralde recibió el primer homenaje que su pueblo le tributó. El trabajo era totalmente falcesino, siendo él su productor, los intérpretes los Gaiteros de Falces sobre unas partituras de Bernardo Zala y Galdeano, compositor falcesino del siglo XVII y la portada un grabado de Goya en el que se ve al torero falcesino, “El Licenciado”, dando uno de sus característicos pases.
Decir también que los arreglos musicales de las partituras del siglo XVII fueron de los Gaiteros de Estella, de los cuales formaba parte, y sigue todavía hoy, Xalbador Martinez, falcesino de nacimiento y que las mismas son ahora y desde entonces las conocidas y bailadas por el grupo local de Danzas Makaia como “Danzas de Falces”.
En un nuevo apartado creado en su web, podéis ver enumeradas todas las producciones. Iremos añadiendo en cada una fotos y anécdotas si las hay, pero de momento nos cuenta alguna aquí, dentro de su biografía.
Otra de las producciones que dio nombre y éxito a la empresa fueron los tres trabajos que produjo para al “Trio Veracruz”, muy conocidos por estos lares y que durante años tuvieron éxito cantando boleros y música sudamericana. Con uno de sus trabajos, “Sol de medianoche”, consiguieron clasificarse para la última fase de los Gramy Latinos. Nadie se pudo imaginar la sorpresa que supuso recibir una carta comunicando la noticia. No llegaron a la final, pero para el trío supuso un fuerte apoyo que les sirvió para extender sus actuaciones por lugares hasta entonces impensables. Además, para Peio supuso pasar a ser miembro de número de la academia de los Grammy, aunque nunca asistió ni a votaciones ni a las entregas de premios; queda un poco demasiado lejos…
Peio no se puedo olvidar de una producción muy especial para él, que fue el CD y Videoclip del colectivo Saray (mujeres y hombres que luchan contra el cáncer de mama), muy especial porque le permitió conocer a estas personas que sufren la enfermedad y que dan lecciones de vida a todos. A él se las dieron y sigue manteniendo su amistad y su contacto.
La composición fue de Kai Etxaniz, la tituló Supervivo, y hubo muchas colaboraciones, voluntarias y de la propia asociación, contando también con trabajadoras y trabajadores de Volkswagen.
En la grabación del vídeo participaron músicos y artistas como El Drogas, Silvia Guillén, Chuchín Ibáñez, La Chula Potra, o Kepa Junkera; futbolistas como Patxi Puñal, escritores, periodistas, representantes de grupos sociales y también equipos oncológicos y personal sanitario de Osasunbidea que atiende a las personas afectadas por esta enfermedad.
A Peio le gustaría destacar también el CD Baile de era de Estella, de los Gaiteros de Estella, que agotó varias ediciones y hoy en día se sigue vendiendo. También los dos trabajos de recopilación llamados Registros Históricos Vol. 1 y Vol. 2, dos discos recopilatorios de Gaiteros de Estella que supusieron un gran esfuerzo de localización y permisos de difusión, pero que produjo la satisfacción de saber que esas grabaciones ya no se perderán, por estar en un formato contemporáneo.
Tambien aquí habría que incluir una de las referencias que más ventas ha tenido y sigue teniendo “Fiesta sanferminera Homenaje a Manuel Turrillas” de la orquesta Nueva Etapa, que este año 2023, celebra su 50 aniversario y que cuando se hizo la grabación 1998 celebraba el 25. Los himnos de las peñas y canciones muy conocidas del maestro Turrillas, estan incluidas en el trabajo, y una menos conocida “Aquí radio Falces” que en los años 60 puso en el mapa festivo al pueblo.
Podría contar todos los trabajos que en estos treinta años la empresa ha lanzado, pero sería largo y tedioso. Por esa razon, se han incluido todas en un nuevo apartado de la web dentro del menú “trabajos” y recalca tambien que pueden escucharse en todas las páginas on-line de música del mundo gracias a la distribución digital de The Orchard.
En un nuevo apartado creado en su web, podéis ver enumeradas todas las producciones. Iremos añadiendo en cada una fotos y anécdotas si las hay, pero de momento nos cuenta alguna aquí, dentro de su biografía.
En aquel momento, no era nada fácil acceder al mercado digital, ya que existían demasiadas producciones y ellos eran un sello pequeño y recién puesto en marcha, y como la mayor parte de las producciones eran de folclore, ni tan siquiera lo intentaron.
Cuál no sería su sorpresa, cuando un día les hacen una llamada desde una empresa de Nueva York, desde su sede en Barcelona. Su nombre es The Orchard, la más importante distribuidora digital. Y la llamada se realiza porque quieren distribuir la música sanferminera que su empresa produce, ya que en el mercado digital su existencia era nula. Peio está encantado a la vez que sorprendido y sin dudarlo lo más mínimo acepta. Este es el modo en el que entran en el mercado digital en un momento en el que sólo era posible hacerlo si tenías un gran sello discográfico.
Para ponerse en marcha, Peio necesitaba un padrino conocido de talla mundial que hiciera la presentación, a poder ser del mundo de la música, pero como se hablaba de música navarra, y en aquel momento triunfaba y llevaba el nombre de Navarra por el mundo Miguel Induráin, contactó con él y contestó sin dudarlo con un sí a ser el padrino de la actividad.
Peio tuvo una conversación muy amena sobre la fiesta de San Fermín, que es la responsable de llevarlo a ese mercado, y sirvió para presentase al mundo de la mano de Miguel. La entrevista sigue en la página de The Orchard.
Hoy la empresa de Peio sigue con las producciones, y se imagina que los que estáis leyendo esto sabéis que pasó hace unos años con ellas en soporte físico: todo se fue al traste y se pasó de producir tres o cuatro trabajos al mes, a una o dos al año. Son los trabajos de su amigo Chuchín Ibáñez, que como se sabe, es “caballo ganador” y vende todo lo que publica.
Peio hizo un gran descubrimiento con Fran Idareta, al que produjo su empresa varios trabajos excelentes de acordeón, y sobre todos quiere destacar Pamplona ciudad de todos, un trabajo grabado en directo en el auditorio de Barañain, y organizando dos conciertos, que fueron grabados por las cámaras de ETB y que durante algunos años emitían días antes de comenzar los Sanfermines.
Desde la perspectiva de hoy, reconoce Peio que no tuvo la repercusión que esperaba; sin embargo, le enorgullece decir que fue una producción de su empresa. Se pusieron a la venta un triple CD, mejor dicho, un CD con el concierto y dos DVD, uno con el concierto y el otro con un documental titulado “Calle Estafeta”, que explica cómo se hizo el trabajo y cuál es su temática.
En los conciertos participaron artistas conocidos llenando el escenario con ciento dos músicos, además del propio Fran, y bajo la batuta de Enrique Ugarte, director en aquel momento de la Orquesta Filarmónica de Munich.
Participaron los coros de Etxarri–Aranatz y La Asunción, música de cámara compuesta por veinticinco maestros de la Orquesta Sinfónica de Navarra, Los Hermanos Anoz, Gaiteros de Estella, Etxak txalaparta, Enrike Zelaia, Juan Mari Beltrán, Kepa Junkera, Carlos Nuñez con Xurxo y Pancho, Eduardo Casis, David Johnstone, Javier Garayalde, Joxan Goikoetxea, Julius Romero, Unai Otegi, Mikel Gaztelurrutia, Fermín Idareta, los textos de José Luis Allo Falces y la voz en off suya y de Belén Galindo.
Para terminar con este apartado de las producciones musicales, ya que como se ha dicho anteriormente hay un lugar concreto para ellas en la web, no puede dejar de hablarse de un artista navarro que siempre ha estado con Peio y sus sellos de producción. Este no es otro que Chuchín Ibáñez.
Peio cuenta que es uno de sus artistas más vendedores, y al retomar su carrera artística, y aunque los dos primeros trabajos los hizo por su cuenta, enseguida se unieron y empezaron a trabajar juntos. En estos más de 20 años de carrera de Chuchín, han salido al mercado otras tantas producciones, aquí os dejamos imágenes de algunas de ellas. Gracias a él, descubrió Peio otro nuevo modo de estar en el escenario como presentador de eventos y actividades de variado tipo.
Primero en los conciertos del propio Chuchín, aunque decir “del propio Chuchín” es un modo de hablar, ya que en los mismos siempre le gusta contar con infinidad de artistas y compartir con ellos presentaciones de discos y otras variables culturales.
Después de ser observado ejerciendo de maestro de ceremonias, otras personas y colectivos pidieron su colaboración a las que respondió afirmativamente. Como Peio dice y repite, es un modo distinto de estar en el escenario, que permite improvisar y poner ciertos toques de humor que es algo que a él le encanta.
De estas colaboraciones con Chuchín, surge la idea de montar espectáculos en el que cupieran los dos y, sin decirse nada el uno al otro, sabiendo que él canta rancheras y Peio recita poesía, nace Poesía Ranchera.
Peio recita alguna de las letras de las rancheras que después Chuchín Ibáñez canta, con ello pretenden conseguir que los espectadores conozcan exactamente lo que dice la letra ya que, la mayor parte de las veces, se oye o se canta una canción sin saber que dice.
Tienen claro que a un sinfín de programadores la palabra poesía no añade nada al espectáculo y les da cierto miedo. Asi que no demasiados apostaron por él, y solo lo llevaron a cabo en cinco ocasiones. Peio asegura que lo disfrutaron tanto Chuchín y él, como las personas que tuvieron a bien acudir a ver y escuchar el espectáculo.
Hay anécdotas sobre las grabaciones que ha compartido, que se irán incorporando en el lugar de la web en el que se habla de las mismas. Si las contara aquí se haría esta biografía interminable.
Su pretensión, con esta biografía, es hacer saber a quién tenga interés y curiosidad en acercarse a conocerla, sólo lo que tenga relación con la farándula, pero quiere hacer mención ahora a su vida privada, porque piensa que este momento fue importante en su vida, como para hacerle cambiar la forma de verla, y empezar a dedicarse en cuerpo y alma, a lo que hoy es.
En esos años conoció a la persona que forma parte de su vida desde entonces, con quien fue padre y, cuando mayor satisfacción mostraba, sin ninguna explicación concreta, la mente le dijo ¡stop! Y comenzó a tener síntomas extraños que le llevaron a médicos que nada encontraron en su cuerpo, por lo que fue el propio Peio quien solicitó a su médico de cabecera que le procurase una cita con algún profesional de salud mental.
Se extrañó mucho el galeno, porque nadie hasta entonces le había solicitado algo así, pero Peio lo tenía claro, si no existían males físicos, algo psíquico podía estar incubándose.
Lo visitaron en un centro de salud mental y estuvo durante dos años con citas semanales con el psiquiatra. Nunca ha tenido miedo de contarlo y quiere recomendarlo a todo aquél que en algún momento note síntomas de una posible depresión o simplemente mentales.
Familia y amigos, fueron fundamentales para salir del profundo agujero en que se encontraba en aquel momento.
Peio confiesa que aprendió mucho en ese tiempo y, sólo cuando se sintió capaz de encontrarse con su mundo, comenzó a frecuentar de nuevo la farándula no solo como productor, también como lo había hecho desde niño, como artista.
Volvió a la gaita y a colaborar en emisoras de radio en programas culturales. Sabían de sus dotes por entrevistas que le habían hecho como productor muchos locutores de diferentes emisoras. Recuerda con mucha alegría aquel tiempo y locutores y locutoras como, Elisa Ramírez, Maite Moro, Belén Galindo o Roberto Gómara (Bobi).
Pasado un tiempo, tuvo su propio programa entrevistando a múltiples cantantes, actores, escritores, faranduleros, como a él le gusta llamarlos. De esa época nace su amistad con Ezequiel Barricart, alguien que le ayudó y que sigue ahí cuando lo necesita, y también José Aldaba, que hace años dejó la radio para ser el jefe de comunicación de Cruz Roja Navarra.
Dentro de los entrevistados también hubo poetas y eso le hizo acercarse al mundo de la poesía, un mundo para Peio desconocido hasta entonces y que consideraba raro para gente rara. No se hubiera imaginado entonces que acabaría teniendo una relación tan estrecha con los poetas y la poesía como la que tiene desde hace años.
Conoció a los poetas navarros Santi Elso, Josu Calvo y José Luis Allo, y los frecuentó con asiduidad. En muchas ocasiones se hacían confidencias tomando algún pote juntos mientras hablaban de poesía, y acabaron por invitarle a sus recitales.
Ahí comenzó a vislumbrar la poesía de otro modo, descubrió que “hay poesía para todo y para todos”. Y con el tiempo, le invitaron a recitar con ellos llegando a formar un grupo que, como no podía ser de otro modo y dado que el bar era siempre el común punto de encuentro, se bautizó como “Cuarteto de Barra”.
Antes de consolidar los recitales, hicieron una lectura dramatizada de El Quijote, cuyo guion y propuesta de ponerlo en escena corrió a cargo del poeta José Luis Allo Falces, y que se representó en varios colegios de Navarra, y cuyo estreno se hizo en el escenario de la Casa de la Juventud, en la que estuvieron acompañados por otros aficionados a la literatura.
Ese fue el inicio de su faceta de rapsoda que llega hasta la actualidad. Al principio eran recitales en bares, sociedades y demás garitos, cosa que tampoco era muy habitual para recitales de poesía.
En los mismos se recitaban todo tipo de poemas, aunque en determinadas ocasiones eran recitales de temas concretos: el vino, la muerte, el amor, el sexo, y a Peio siempre le correspondía la parte más humorística del recital, además de permitirle improvisar en las presentaciones.
Alguna vez, comenta Peio, le preparaban encerronas. Hace especial mención al día en el que estaba programado uno de los recitales sobre sexo y a él le fue asignado el poeta italiano Aretino, que tiene un libro de sonetos sobre poemas de sexo, cuasi pornográficos. Salió del paso con mucha fortuna y donaire añadiéndole, por supuesto, mucho humor…
Y así transcurrió un tiempo y, como suele ocurrir, por circunstancias de la vida, Santi y Josu lo tuvieron que dejar, y José Luis y Peio se montaron un dúo al que bautizaron “En barra dos”.
Pasados unos meses, José Luis se trasladó a vivir a Madrid y aquella agradable aventura terminó. Para entonces a Peio ya le había picado el gusanillo de recitar con público y no se resistió a dejarlo. Además, observó que el público asistente se divertía con sus intervenciones, por lo que se propuso seguir adelante en solitario montándose su propio “Monologo Poético”, en el que recitaba con improvisaciones según era el público al que se dirigía.
Hizo varios recitales y a uno de ellos invitó a acudir a Xabier Flamarique y Jaione Urtasun, profesores y actores de teatro conocidos y reconocidos para que opinaran sobre lo visto en el escenario y si creían que podía salir algo de allí. Parece que no les desagradó lo que vieron y le propusieron teatralizar el recital ¿Cuál fue su respuesta?…
Se inició la colaboración con ellos y durante año y medio lo fueron formando para que fuera capaz de permanecer en el escenario durante hora y cuarto con un espectáculo al que denominaron POESICILINA.
Como ya ha contado había hecho sus pinitos en el teatro hace años, pero ellos le enseñaron los secretos de la actuación, la expresión, la dicción y muchas cosas más que le hicieron amar el escenario hasta el punto de necesitarlo como si de una droga se tratara, según Peio confiesa en cada ocasión que se presenta.
Sobre POESICILINA, está todo recogido en el menú de su web. Reconoce que ese “jarabe poético para un mundo más ético” se merece una web para él solo.
Como dice, no sólo lo prepararon para ese espectáculo en concreto: como Peio es un atrevido con lo que ama, empezó a presentarse a casting para películas, series, cortos, y lo que fuera.
Al principio y aunque se presentaba a todo tipo de casting, no conseguía contratos, quizá un veinteañero se hubiera decepcionado de tanto oír no, pero él siguió insistiendo hasta que, por fin, lo eligieron entre otros para una «actuación de rol» en la película Maixabel.
Desde este inicio, no han parado de llamarle para otros proyectos. Peio quería actuar y cree que eso les pasa a todos los que se dedican a ello, pero solo le llamaban para figuración, aunque el sigue insistiendo “soy actor”. Pero claro, hay que comer todos los días y había decidido hacerlo en este mundillo de la farándula, así que estaba dispuesto a hacer lo que hiciera falta.
A sus sesenta y dos años aquí está, con muchas ganas de vivir y de actuar que es lo que de verdad le hace sentirse muy feliz. Y que nos cuente todas estas pequeñas o grandes cosas.
Hasta aquí, y bastante resumido lo que ha sido su vida en este mundillo, seguirá contando más sobre ella, pero no de una forma continuada como hasta ahora, como ya dijo al principio todo ha sido de memoria, pero le ha servido para ir volviendo a su pasado y a sus recuerdos, y los seguirá haciendo tambien vuestros. Muchas gracias a los que habéis seguido esta biografía, ojala os haya parecido interesante, y si no lo habéis hecho ya, os invitamos desde estas líneas a que sigáis a Peio en cualquiera de sus redes, canal de YouTube y pagina web, www.peioetxarri.com
Cada cierto tiempo, te enviaré historias, novedades, actuaciones o noticias del «mundo Peio»!
Tuve «La Fortuna» de participar en este rodaje durante cuatro días. Fue algo espectacular que se llevo a cabo en un barco copia exacta de los de aquella época. Salimos a altar mar y disfrutamos un montón. Rodaje inolvidable.